domingo, 25 de diciembre de 2011

LA ÚLTIMA PALABRA


Ya  no existe  la última palabra
a flor de labio
La frase desorbitante
que revive día a día
que zumba en los oídos
y  desfigura el viento
Ya no existe la palabra
que cumpla todos los preceptos
que nombre lugares extraños
donde no haya pisado la injusticia.
Que nombre la alegría del hombre
en éstas fechas.
Ya no existe la última palabra…

Y si acaso la encuentro
entre los dientes
la escupiré a la cara de los necios,
aquellos,
que no saben que el equilibrio emocional
del pueblo se halla sin un centavo en el bolsillo.
Impíos aduladores del “dollar”
Y  se olvidan de Dios en fecha santa.

domingo, 18 de diciembre de 2011

LA MIRADA DEL INDIO


Era como un pescador sereno en el arroyo
preocupado por el futuro.
Por evitar pescar su muerte
casi no tiene lágrimas.
y cuando ve pestañear a sus hijos
les  cuelga del cuello
la sobrevivencia
pensando siempre en asesinar a los asesinos
para asesinar su propia muerte.
La  autopsia revelará
que ahuyentaba el peligro de su territorio.

Jamás falsificó la verdad
ni dio autenticidad a la mentira
Es la versión oficial del pueblo,
no de aquellos que siguen en la tarea
de mentirse unos a otros
con promesas sin cumplir
y sonrisas sin reír,
con alianzas que traicionan
dividen, parten, seccionan
con el espectáculo de su propio crimen
de cara al llanto de los hijos.

No hay manera de ocultar la mirada,
cada hijo es un puñal
sobre la cegadora luz del poder que divide,
porque el indio no sonríe.
El indio suda sangre,
sus pupilas son piedras
y  sus uñas tierra,
porque todo se derrumba cuando apuñalan a la vida.


domingo, 11 de diciembre de 2011

ENEMIGO COMÚN (Al regreso de La bestia: MANUEL A. NORIEGA)



Por una noche abandono la poesía
o al menos pretendo olvidarla
cuando el poema no es capaz
de sellar las oquedades
y me parece todo bien el insulto “boca adentro”.

No puedo olvidar lo que será mañana
la causa del “JUST CAUSE” regresa
por eso hoy abandono la poesía…,
por mi pueblo

Y vengo adolorido a escribir la paz ya sin paz
imagino al país dominado por “La bestia”
ya me había acostumbrado a no tenerla en suelo patrio
Mañana me quito los ojos para verle
ahora que está en silencio
no volverá con el estridente coloquio
Música de balas y tortura
de exilios comprados y picanas,
de manguerazos y palizas

Tal vez intente cerrar una herida demasiado grande
con un tiempo anecdótico a cuestas
un año duro e inolvidable...,

Tu no lo recuerdas como yo
no estabas aquí como nosotros
entonces no fue fácil para nuestras calles
y mañana tampoco al caminar a “La bestia”

Recuerdo un diciembre de muchas lágrimas
estrenando el sufrimiento y enterrando grandes amores
yo no entendía porqué la ciudad estaba a oscuras,
porqué disparaban… reinaba el lado oscuro.

Un IMPERIO atrapando la piedra en su zapato,
fingiendo que no hubo alternativa
y un pueblo sufriendo lapidación de parte y parte
con el alma adolorida

Por eso hoy abandono la poesía
o al menos pretendo olvidarla
porque el poema no es capaz
de cerrar una herida demasiado grande.

domingo, 4 de diciembre de 2011

RASTRO


La mañana se desploma,
leva  anclas y se hunde en la tarde.
Se entrevé  navegando el tiempo.
sobre  el rostro arrugado de la tierra
con deseos cubiertos de miradas,
avistando la larga cabellera de la noche.

Ya no puedo sostener la derramada soledad
a  la sombra de la carne y mis huesos.
Mi  voz  que ahora huye,  baja por las paredes
hasta quemarse en  tus sábanas
despreocupada de la muerte.
El alma no sabe de inventos ni de cálculos,
no tiene principio ni fin,
se baja cantando al mar,
se ata en el viento marinero
y  llega  acariciando la espuma
a  la cresta de tus olas.

A la orilla del  sueño,
en las mil vidas del mundo,
despierta una crisálida sedada…
Es mi amor
con el corazón en tu rastro.

jueves, 1 de diciembre de 2011

TU AMOR Y EL HORIZONTE



A Maggie

Mi mente navega por tu imagen y  me descubre
entonces florece mi poesía
mojada de trinos y turgentes colores
para compartir mi soledad
que los nombres no sean casuales
y  descubrir mis pasos en los tuyos

Nada es tan importante como amarse
mientras  las horas pasan y se detienen en la rueda de la noche
silenciosas, cadenciosas, perfectas y sumisas
y  esparcen mis letras en la negra belleza.

Esperaremos el día en los años venideros
y  encontraré el amanecer en tus cabellos perdidos
allende tus litorales, predeciré nuestro destino
con  mi presencia tus lágrimas ya no tendrán camino
ni dibujar tristezas  que  tengan ningún motivo

Tu piel acostumbrada a mis noches
y  al olor de café.
A sentir y amar.
a  ambos lados de un mismo mundo.
Así pasaremos sumisos los segundos
como una larga e infinita cadena de apuñalamientos
barrida por el silencio.

El tiempo queda en los quehaceres de los hombres
sé que con un gesto franco
junto al cómplice destino, volveremos
a  medir el tamaño de los suspiros
hoy tan lejanos como el horizonte.

ÓPERA PARA CUERDOS




He vivido bajo aguaceros la libertad completa
hasta beberme la lluvia con las manos.
Soy libre por la lluvia.
Me descalzo del nombre citadino
y  florezco a la par de los cafetos;
la lluvia es mi bandera,
pone azahares en mi entorno,
sacude mi casa;
viene a ordenar todas las siembras
con esas notas traídas de lo más celeste.
Salvadora del páramo, libertadora mía.
Ni el cristal se enturbia,
ni la guitarra enmudece.

Viajo por  arroyos y escucho su ópera.
Subo a los cerros en neblina envueltos
a cantar a los árboles
lavándome la cara y los malos pensamientos
deteniendo  el tiempo
para que haga memoria de mi.
Es curioso,  me ha vuelto a otras edades
apuntando las arrugas que miro con respeto
cual  actor de  ópera.

Saludo a la vida deseándola más plena
todos quieren verla, escucharla, acariciarla.
La vida como la poesía, vino para ser escuchada
Como una ópera…, para cuerdos…